Es día de Nochebuena y estamos preparándonos para las abundantes cenas familiares de Navidad. Estas reuniones familiares vienen acompañadas de un buen rollo, pero también de enormes porciones de comida que pese a ser muy agradables al momento de ingerirlas, pueden hacernos sentir muy mal luego porque nos ha caído muy pesada.
Es por eso que en Bricolemar os damos estos consejillos sobre cómo evitar que la cena de Navidad nos caiga pesada, para disfrutar de esta noche sin arrepentimiento alguno.
La cena de Navidad es un tradición familiar muy bonita de nuestra cultura, pero los excesos a la hora de comer pueden hacer de estos momentos, una verdadera pesadilla personal o inclusive familiar. Por eso decidimos investigar un poco sobre qué se puede hacer para evitar pasar esos malos ratos y en el diario El Comercio de Perú, hemos encontrado una entrevista con una nutricionista que ofrece una serie de consejos.
Consejos sobre cómo evitar que la cena de Navidad nos caiga pesada
Según la entrevista de la que extraemos estos consejos, todo debe comenzar con una preparación previa.
- Es recomendable que los días y horas previas a la cena de Navidad se ingieran alimentos ligeros, con características diuréticas y se beba mucha agua, ya que esto ayudará a mejorar la digestión y la asimilación de los alimentos.
- Al momento de ingerir las cenas navideñas es preferible hacerlo con cierta moderación y respetando las porciones, esto no significa dejar de probar cada comida que encontremos en la mesa o pasemos de largo los entrantes, postres, turrones o mazapanes, sino que no hagamos competencia por quién llena más los platos o repite más porciones y que cada quien se sirva lo justo.
- Las cenas familiares de Navidad suelen hacerse a altas horas de la noche, justo después que se han logrado reunir a todos los integrantes de la familia en la mesa, es por eso que lo más recomendable es no irse a la cama justo después de comer e inclusive esperar unas 4 horas, para que de esta manera el organismo haya tenido posibilidad de procesar mejor lo ingerido.
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Imagen cortesía de Pixabay Si se está encargado de la preparación de los alimentos, se debería tratar de optar por preparaciones más saludables y menos grasosas y calóricas. En la cena de Navidad se suele ingerir el doble de calorías de las que se ingieren en cenas comunes. Es por ello que siempre sería recomendable quitarle la piel a platos como el pavo, o al cordero y evitar aderezarlos con especias muy fuertes o picantes.
- A la hora de ingerir bebidas alcohólicas antes y después de la cena, también es importante la moderación, no sólo por los reconocidos efectos que produce el alcohol sobre nuestras conductas sino que también son bebidas muy calóricas que pueden perjudicar los procesos de asimilación y digestión de los alimentos.
- Finalmente, nos gustaría agregar que siempre es bueno contar con un poco de bicarbonato de sodio y agua para después de la cena de Navidad, debido a que siempre puede ayudar a calmar la sensación de llenura extrema o ayudarnos a liberar gases que se produzcan durante el proceso de asimilación de los alimentos.
Estos son apenas unos consejillos a tener en cuenta para más tarde y para todas las cenas navideñas en las que podáis participar durante estas fiestas.
¡Desde Bricolemar os deseamos lo mejor para estas fiestas de Navidad y un muy feliz año nuevo 2017! Y por supuesto que os esperamos para seguiros ofreciendo lo mejor en servicios de bricolaje online.
¿Qué os parecen estas recomendaciones? ¿Tenéis algunas otras que podáis sugerir? Esperamos vuestros comentarios.
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